¿NOS SENTAREMOS EN MIRAFLORES COMO SEA?



La República Bolivariana de Venezuela está atravesando por un callejón que las paredes a los lados tiene, son movibles, estas se irán acercando a medida que se tomen decisiones que no sean convenientes para los que no están acostumbrados a trabajar duro para mantener a su familia, saliendo a protestar los opositores por todo lo que el Estado plantee para favorecer a los más necesitados. 
     Desde que la oposición pierde las elecciones presidenciales de 2012, se crea un campo minado de rencores e inconformidad, mandando a la población a salir a las calles a destruir todo lo que este a su paso, inducido por los representantes de los partidos políticos de la oposición, esto provoco muertes y destrucción de inmuebles como centros de asistenciales de salud, escuelas y sedes de partidos políticos del oficialismo.
     Luego se presenta la oportunidad y el Concejo Nacional Electoral coloca en su calendario la fecha de elecciones municipales, las cuales, participaron las fuerzas políticas que hacen vida en el país, una vez más, es derrotada la oposición en elecciones transparentes, las cuales han sido vistas y supervisadas por los diferentes partidos políticos venezolanos, los observadores internacionales invitados por el árbitro de dichos comicios.
     Una vez más los resultados no favorecen a la oposición, pero los arremeten contra el gobierno nacional con marchas, disturbios y saboteos de los servicios públicos, expresando su descontento, pero ahora con una nueva modalidad, la cual, se aplica en los países europeos como: Afganistán, Irak, Kuwait, Libia, Siria, España, entre otros.
     La oposición arremete contra la población civil obstaculizando las vías para que los trabajadores lleguen tarde a sus sitios de trabajos, atravesando guayas de un extremo a otro para degollar a personas inocentes, trancan carreteras para que no puedan ser distribuidos los alimentos en el territorio nacional, destrozan las unidades de transporte público en las principales ciudades del país, arremeten contra escuelas en diferentes puntos de la nación, pero las autoridades del Estado Venezolano atrapan personas contratadas por la oposición con artefactos para preparar coches bombas y vinculadas con actos terroristas.
     Una vez más, aparecen mercenarios contratados por la oposición y con instrucciones del gobierno del tío Sam, y saliendo por todos sus medios de comunicación e información los voceros guerreristas, capitalistas y neoliberales alzando sus voces a favor de los fascistas, terroristas por los protestantes presos por los hechos, que hoy en día, están perjudicando la tranquilidad de ciudadanos y ciudadanas de la patria.
     En el primer mandato del presidente electo para el periodo 1969 – 1974 Rafael Caldera, la clase obrera y los estudiantes universitarios no estaban de acuerdo con la política empleada por el gobernante, quien en su campaña ofreció una cosa y dio lo contrario, existía el cobro para la atención de la salud, la educación, no había decreto para aumentos de salarios, ni para becas estudiantiles, ni para mejoras de pensiones de los adultos mayores.
     Una protesta justa del pueblo llano era reprimida ferozmente, con peinillazos, gas lacrimógeno, eran utilizados la ballena y el rinoceronte para agredir al pueblo, se utilizaba armas de fuego por parte de la guardia nacional y policías quienes arremetían contra protestantes sin respetar la edad, es decir, no se respetaba el derecho humano, y los detenidos eran torturados, perseguidos, desaparecidos y hasta muertos de forma descarada y en otros casos misteriosa.
     Nadie quería ser atrapado en una marcha por la guardia nacional porque ya se sabía que iba a ser torturado y de no ser así, atacaban a la familia para obligarlo a que se entregara y ya se sabía el resultado.
     Era impensable pararse al lado de un uniformado y arrojarle orine, agua, gritarlo ,mucho menos brincar sus filas y salir ileso , ser entregado a algún familiar de forma inmediata, eso no era pensable, pero en la actualidad lo vemos a diario por los canales de televisoras públicas y privadas, haciendo destrozos a las instituciones públicas y privadas por parte de estos fascistas terroristas que solo quieren que el presidente electo por el pueblo renuncie, para ellos pretender sentar a alguien en Miraflores, sin hacerlo por la vía electoral.
     No se puede sentar en la presidencia de la república a alguien impuesto por la fuerza, como la oposición ha pretendido hacerlo, atropellando los derechos fundamentales de la carta magna que aprobó el pueblo en diciembre de 1999.
     Siguen encerrando a sus propios compatriotas con sus guarimbas en sus mismas urbanizaciones de clases media y alta de la sociedad venezolana, pero no todos los que residen en estas zonas de las capitales del país están de acuerdo con esas posturas, donde ya han fallecido personas porque los mismos manifestantes no lo permiten o les cobran dinero para dejarlos salir de sus zonas donde residen.
     Los Estados Unidos han invertido mucho dinero en esta locura que se ha planteado la oposición, ellos empeñaron a la nación con nosotros adentro y sin ser consultados si queríamos dar ese paso para el precipicio, estuvimos sumergidos en la ignorancia hasta que salió a la palestra una persona quien nos explico la necesidad de leer la constitución y hacer valer los derechos que tenemos y que nos fueron conculcados por muchos de los que ahora desean darle en bandeja de plata la república al imperio norteamericano.
     Nadie se dejará quitar los logros obtenidos por el pueblo, en tan poco tiempo, desde la llegada del comandante Marcos Pérez Jiménez al poder, hasta la llegada del comandante Hugo Chávez y ahora con Nicolás Maduro, hay brechas y huellas históricas que permitirán demostrar lo que fue la República de Venezuela y lo que ahora es la República Bolivariana de Venezuela.          
                 

SOBERBIA, IMPOTENCIA, MANIPULACIÓN E IGNORANCIA.



      Al hacer valer nuestro derecho nos llevamos por delante una cantidad de cosas que no nos pertenece y eso lo hacemos al ser soberbios, imponiendo a nuestro antojo, puntos de vista que pueden estar fuera de contexto o de lógica, como lo podemos observar en la conducta de ciudadanos y ciudadanas que protestan en contra de un mandatario que está ejerciendo una política incluyente, pero para la oposición venezolana es  excluyente y ventajista.
     Pero a todo esto se le adhiere algo muy importante para observar sin ser médicos especialistas en conducta humana y se trata de la impotencia, pero no es la del siclo biológico, sino la de sentirte mal al no alcanzar una meta propuesta con antelación y eso provoca el desarrollo de enfermedades mentales, que para un sociólogo, psiquiatra o sicólogo, determina con suficiente claridad el estado del paciente, haciendo sus planificaciones y aplicando sus metodologías para que ese paciente mejore, según sea el caso.
     Aunque no hay que dejar por fuera una herramienta muy utilizada por los políticos que es la manipulación, la cual, utilizan de manera directa o subliminal para hacer creer que lo que ven las demás personas no es creado por la misma que lo aplica y deja ver que es el contrincante quien está realizando la acción, asomando la posibilidad de que sea la opinión pública que haga el resto.
     Allí está ya la mesa servida y solo falta añadir algo que la sociedad venezolana siempre ha sido débil y es el desconocer algunos puntos que salen al tapete, quedando denotado por los estudiosos de la conducta humana como la ignorancia, cosa que nadie de ella escapa y es por eso que hay filósofos  que mantienen que “La ignorancia no es mala”.
     Ahora bien, al realizar un coctel uniendo todas las palabras del título de este reportaje de opinión, lograremos nada más y nada menos que un desastre en potencia, que al hacerse colectivo dentro de la sociedad dejará como resultado una locura colectiva, que es la que se observa en estos momentos en el país.
     Jóvenes que salen entrevistados en radio y televisión, solo se limitan a desearle la muerte al mandatario presidencial, vociferando cosas como “Maduro vete ya y como una rata morirás”, destruyen bienes públicos como plazas, fuentes, fachadas de instituciones del Estado Venezolano como la destrucción la fachada de la sede del Ministerio Publico en Caracas, donde una joven vocera estudiantil opositora, portando un megáfono gritaba “La fiscal general es inepta y corrupta, renuncia ya”.
     De esa manera se focalizan grupos pequeños en todo el país, en algunos casos armados con pistolas, cuchillos, tubos, piedras, bombas molotov, queman la basura que consiguen, cauchos, ramas de árboles y hasta vehículos particulares parqueados al frente de edificios y casas donde residen los dueños, pero de salir en defensa de su propiedad son agredidos con violencia.
     Destrozan establecimiento comercial de comida rápida, disparando armas de fuego contra los trabajadores de dicho local comercial, no permiten el paso de vehículos que lleven enfermos a centros asistenciales en las diferentes ciudades del país, la participación de grupos de motociclistas de alta cilindrada que apoyan estas acciones vandálicas, que en épocas vacacionales decembrinas o carnavalescas hemos aplaudidos en sus desfiles por sus vestimentas y coloridos de sus imponentes vehículos.
     Utilizan medios de comunicación nacional e internacional para divulgar una supuesta violación de los derechos humanos, colocando manifestaciones de diferentes lugares del mundo y haciéndolas pasar como si fuesen de este momento y de este lugar.
     Detalles que han sido desmentidos por los servicios informativos nacionales y en distintas ruedas de prensa con corresponsales internacionales, realizadas por el mandatario presidencial, para que estos periodistas lleven a sus países  información real y veraz de lo que sucede en la república bolivariana.
     Colocan en la prensa nacional y extranjera, fotos y reportajes de protestas de otras latitudes y de eventos de vieja data para mantener en el contexto internacional una imagen contraria de lo que aquí sucede y que haga el efecto desinformativo para provocar una intervención bélica en el país, solo por no compartir  o tolerar otra manera de ejercer la política nacional e internacional.
     Son siglos realizando esas prácticas violatorias a la soberanía del pueblo venezolano y violando los derechos fundamentales constitucionalmente hablando, y son los imperios los que aplican la fuerza bélica a quien sea y en cualquier parte del mundo, utilizando ese poder y su hegemonía informativa como lo han hecho en otros países como por ejemplo en: Puerto Rico, que en la actualidad es colonia estadounidense, en Chile, que sufrió el derrumbe de su economía y el asesinato de su presidente electo democráticamente.
    En Panamá, que le violaron su soberanía y matando a sus habitantes el algunas poblaciones, en Colombia, donde el ejército norteamericano a violado a mujeres de diferentes edades sin ser castigados los actores de esos delitos, en Afganistán, con sus bombardeos a la población civil, a escuela y hospitales, con el cuento de que persigue terroristas, al igual que en Libia y en Siria, pero agregando el querer apoderarse de sus riquezas, en  Honduras, donde apoyaron la salida brusca del mandatario presidencial por ser nacionalista, en el Congo, poniendo todo tipo de armas en las manos de diferentes tribus para que se maten entre ellos y poner a un político manipulables y apoderarse de sus recursos mineros, de Haití colocando a una marioneta manejable desde afuera, el cual es rechazado por la mayoría.
     No podía faltar atacar y tratar de destruir a Irán con el cuento del desarrollo nuclear atómico, a Argentina, Bolivia, Ecuador, Uruguay, Brasil, Cuba, entre otros por ser países progresistas y tener mandatarios nacionalistas y aquí en Venezuela por ser un pueblo aguerrido, defensor de su soberanía, de ser privilegiado por lo histórico, lo geográfico y por tener una variedad de recursos apetecibles como: tierras fértiles, gran cantidad de costas marinas, ríos caudalosos importantes, petróleo, gas, agua, minerales diversos y los llamados políticos anti nacionalistas que prefieren entregar nuestros recursos naturales renovables y no renovables en las manos de unos cuantos que siempre nos han engañado.
     No hay nada más que añadir, lo único que hay que hacer es no tomarse el coctel, no caer en chantaje diplomático ni en presiones que son los que nos hacen dudar, pero haga como los paramédicos al atender una emergencia “Ponen una rodilla en tierra para mantener el equilibrio y evitar caerle encima al paciente”.

MANTENIENDO A MI VECINO.



Hay economías que no pueden soportar un desnivel o un cambio brusco porque comienzan a tambalear y finalmente se desploman, no por mal cálculo de la misma, sino por desajustar su balance de una manera repentina o muy acelerada.
     El gobierno Venezolano realiza una estrategia de subsidio a los bienes y servicios para la población que en ella vive, su vecino colombiano realiza una estrategia de mal gusto llaman “Operación Bachaqueo o Economía de Extracción” provoca el descontrol de la economía venezolana y de allí en adelante comienzan los desastres de dicha aplicación o método.
     De esa manera, los partidos políticos opositores comienzan su campaña desinformadora de la economía aplicada por el gobierno revolucionario, provocando tropiezos, disfrazando sus comentarios y dan la sensación a la sociedad, que es el gobierno nacional el que no están dando los resultados satisfactorios.
     Allí aparecen los medios de comunicación e información privados dirigidos por los opositores, que aplican lo denominado “Desinformación Amarillista”, provocando otro problema adicional que reciben los ciudadanos y ciudadanas que solo quieren estar bien informados como lo establece la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, la Ley del Periodista y el Código de Ética del Periodista Venezolano.
     La política alimentaria aplicada desde hace un poco más de una década y media, permite visualizar lo que realmente quieren los opositores. Mira otra vez por el retrovisor histórico rápidamente y visualiza en el panorama hispanoamericano, lo sucedido al presidente constitucional Salvador Allende en Chile, los opositores de Allende estrangularon la economía, cosa que provoco descontento, y así los opositores dominaron y ejecutaron el golpe de Estado, donde el presidente de la nación chilena pierde la vida por defender la voluntad del pueblo.
     Pero de manera clásica aparece lo periodístico mediático, encargándose del resto y sacaron del carril el esquema económico y dominaron al pueblo por el estomago, por la mentira y con la ayuda del imperio norteamericano.
     Otro caso muy relevante ya entrando al siglo XXI es el coso de desestabilización aplicado por los partidos de oposición venezolanos, quienes participaron en el golpe de Estado, en un el paro perolero y en un paro empresarial, donde la población venezolana tuvo que soportar durante tres años esas actitudes hostiles de los opositores y con la ayuda, una vez más, del imperio estadounidense.
     Ahora hay una modalidad que los opositores realizan para desestabilizar la economía venezolana, extrayendo los alimentos subsidiados por el gobierno nacional por la frontera entre Venezuela y Colombia, llevándose hasta la gasolina de contrabando, de manera descara para el país vecino, y por si fuera poco, tenemos más de 6 millones de colombianos viviendo en Venezuela con todos los beneficios sociales, políticos, económicos, culturales, laborales, entre otros.
     Siendo este el momento oportuno para numerar algunos beneficios como: asistencia médica, estudios educativos desde preescolar hasta la universitaria, de manera gratuita, empleos y hasta en todas las misiones aplicadas por el gobierno venezolano, siendo ellos extranjeros son beneficiados sin exclusión.
     Ahora bien, como si fuera poco y desconociendo los convenios que existen entre las dos naciones, del lado colombiano aplican la llamada “Operación Bachaqueo”, consiste en sacar todo lo que puedan al territorio colombiano de contrabando y son vendidos por trabajadores de la economía informal, obtienen ganancias suculentas con nuestros productos de primera necesidad.
     Citando solo un ejemplo: Aquí en el territorio venezolano 60 litros de gasolina tiene un costo 7 Bsf., en Colombia la misma cantidad tiene un valor aproximado de 2.350 pesos colombianos nuestros vecinos solo han traído al país cosas como: el narcotráfico, la narco guerrilla, los paramilitares, los paracos, los cobros de vacunas, el hampa organizada, los desplazados, entre otros.
     En parte tenemos culpa por ser un pueblo tan noble o ingenuo, siempre le ponemos la otra mejilla, históricamente recibimos de ellos desprecio y malas acciones, hay colombianos que nos restriegan en la cara que lo de ellos es mejor que lo que ven aquí en Venezuela, aun así viven aquí.
     No valoran los beneficios que desde esta tierra venezolana han tenido siempre sin ninguna restricción, un mandatario presidencial, en funciones, planificaba realizar un ataque armado contra Venezuela sin ningún motivo, como lo explico el ex presidente Álvaro Uribe Vélez, en una rueda de prensa expreso: “Yo quería invadir a Venezuela pero me falto tiempo”.
     Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde, no es justo que el estado venezolano reciba por parte del estado colombiano esas actitudes que dejan dudas de sus acciones, desconociendo los esfuerzos realizados para el bienestar de ambas naciones.
     Se colocan como bacterias encima de la economía venezolana, la cual se ha calculado para una población de treinta millones de personas según el último censo realizado.
     Pero se adicionan a ella un 20% de la población del hermano país que vive en la zona fronteriza, según su último censo realizado en el 2005 en el hermano país, el cual arroja la cantidad de unos ocho millones quinientos ochenta mil personas (8.580.000) y es allí el desbalance que nos hará colapsar de no poner correctivos a tiempo.
     No debemos dejar pasar estos datos por alto, hagamos un ejercicio matemático elemental, si sumamos a los que están legalmente en el país y los que viven en la frontera, nos dará unas quince millones de personas de nacionalidad colombianas sostenidas por la economía venezolana.
     Allí estarán los oportunistas mediáticos de la comunicación e información privados nacionales e internacionales  listos para repetir mil veces sus mentiras, para volver a engañar a los incautos, que aun no han despertado de la fantasía que desean vivir nuevamente, la viajadera a la casa del Tío Sam y hasta volver a saludar a de su mascota Mickey Mouse.
     El pueblo venezolano debe estar alerta, mirar a su alrededor y también por el retrovisor histórico y picarle adelante a los intentos neoliberales de la política colombiana influenciadas por los gobiernos estadounidenses, que poco a poco desvía cada día más la dirección que trazó la obra revolucionaria de Francisco de Miranda, quien lucho en apoyo a la Libertad e Independencia de los Estados Unidos del imperio español, quien participo en la Revolución Francesa y en la Independencia de Hispanoamérica.
     De Simón Bolívar quien salió de su país a libertar naciones de los imperios de la época, pero no a plagarlos de miseria como históricamente lo han hecho los gobiernos norteamericanos en nombre de la libertad, que después los dominan con sus tratados de libre comercio (TLC), por los saqueos y saboteos políticos, económicos y culturales o por la fuerza bélica, sin respetar la soberanía de los pueblos o los derechos humanos de sus habitantes o Hugo Chávez Frías que rompió ese sueño hipnótico en que nos mantuvieron como marioneta política durante décadas, de manera representativa cuarta republicana y que aun continúan prestándose los opositores venezolanos para fines maléficos y anti nacionalistas.
     El presidente actual de Colombia, Juan Manuel Santos, en la segunda reunión de La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), realizada en La Habana, Cuba manifestó en su intervención lo siguiente “En mi país la economía ha avanzado significativamente”.
     Pero como no va a estar en esa situación su economía, si ha hecho caso omiso a la realidad que sucede en la frontera colombo-venezolana, como la falta de seguridad por parte del gobierno colombiano en la frontera, aquí quedan acertijos por resolver.
     ¿Hasta cuándo tendremos que mantener a nuestros vecinos como bacalaos en nuestras espaldas y duplicar los cálculos de gastos en subsidios a los alimentos de primera necesidad en nuestro país?